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La Hembra del Sol.
- Si me queda el tiempo y yo, no ando derecho, de lo que dejará tendré; lo que haya hecho… - Si me queda el verso y tú, te marchas lejos, no habrá vueltas a tu pecho en otros cuentos. - Si me alumbro,...
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Vuelta Poema.
Siguen lloviendo palabras del cielo de un libro abierto, por la tele en un concierto la Estrella canta un bolero, las velas sobre la mesa encendidas humean cera, las sombras de las cervezas dibujan...
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Candor fortuito.
- Me he despertado indeciso mirando al techo aún dormido, reverberando remedios volviendo de un sueño critico perdido. ‒ ¿Y me pregunto aturdido, donde es que he visto tu signo? - ¿En cuál lugar...
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La misa de la Musa mesa.
Me perturbo al escribir sobre esta mesa que en cada ángulo baja la piel calada a la espalda. Sus caderas boca ancha soportan hojas, rodajas, una vela, una botella y una jarra. Sus cuatro patas de...
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Esperanza de amarillo.
Humedeciendo hasta el suelo y entre pompas con mi espectro, me humedezco a diario el cuerpo, me hago burbujas, me encero; y con fino aceite me ensebo, cada curva y hasta el pecho. Y con mis crema me...
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― Más que una prosa…
Ebria, sin blusa y llorosa se da ella a la luna, pasa noches de sueño y lujurias tentando lechuzas. Triste y sola desierta la alcoba prefiera la altura, cual farola se encienden y se apaga en el...
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El Show de la Chica Ninfa.
– La niña fina y devota abre ojos a la aurora y al sol se siente dichosa pidiendo sus chambelonas, dulces y pomarrosas, mientras se pinta los labios, hasta ver su boca roja… La Chica Ninfa suntuosa...
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Rondas nocturnas…
Abra la puerta, chófer, nos quedamos, les oí decir a la entrada del barrio, el sofocado y ella gritándomelo, gracias señor, pare aquí que bajamos. Y escuché besos, gemidos, zapatos, ropa interior que...
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Sin sal, ni ajo.
Sofocandole su sabrosa boca tentadora y llenándosela a baldes para que eructe espumosa, de masa de mango hervido en la cola de una góndola y de pétalos de magnolias, florecidas a la aurora. Mezclando...
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Testigos de cargo.
La luz al cuarto apagado entraba desde la sala donde habían velas y vasos que sobre la mesa dejamos antes de acostarnos. El humo hacia hilos blancos y el cielo raso grisáceo simulaba a la vía láctea...
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La rendida enamorada.
– Inspírate de mis alas y vuela conmigo atada hasta un concierto de salsa, admirame bien pintada y si te gusta mi cara dibújame cada lágrima y humedeceme con sabila la espalda. – Y si te gusta mi arte...
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En el infinito mismo…
Divino vientre de bomba que explota cuando su ombligo rozan, ojos grandes zalameros, labios puestos con los dedos para que quedaran más bellos y pecho más grande que el cielo, pues lleva un corazón...
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– De nuevo dados…
Restos de besos usados yacen sobre el desván mojado que han dejado terminando, pues los labios, igual de tántricos y en grupos de dos y cuatro, vivos, cárnicos y aún ávidos han partido a darse un...
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– Oliendo a séptimo
Te he visto trasnochado en un ensueño, ondulando endiablada, haciendo gestos, sucumbiendo al clamor, dándome besos y murmurando acalorada un yo te quiero. Y no quise mirarte pues tus juegos, me saben...
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